Una cosa tan simple como llevar mal orientados los espejos retrovisores del coche puede provocar un accidente de tráfico. Acaba de recordarlo la DGT, que ha pedido a los conductores que revisen la colocación de los espejos para evitar sorpresas al volante. Pero, ¿cómo sabemos sin llevamos bien orientados los retrovisores? Aunque parezca mentira, hay conductores que todavía no lo tienen claro.
Cómo colocar los espejos retrovisores
La DGT da dos claves para mejorar la visibilidad y eliminar al máximo los ángulos muertos: por una parte, hay que colocar el espejo interior «bien centrado con la luneta trasera» y, en segundo lugar, los espejos exteriores deben mostrar lo que hay alrededor de nuestro vehículo sin que se vea la carrocería del propio vehículo. «Circula con la mejor visibilidad, coloca los espejos retrovisores: Espejo interior, bien centrado con la luneta trasera. Espejo exterior izquierdo, hacia el lateral del vehículo hasta que deje de verse la carrocería«, ha explicado la DGT a través de Twitter.
No debe verse la carrocería de nuestro vehículo
El objetivo es evitar situaciones como esta: Miras por el retrovisor izquierdo antes de cambiar de carril o de incorporarte a una vía, y cuando empiezas a girar el volante te adelanta un coche que no sabías que estaba ahí. Afortunadamente, esta vez te da tiempo a frenar y corregir la trayectoria, quedando todo en un gran susto. Pero puede que la próxima vez no tengas tanta suerte y termines chocando con un coche, una moto o un ciclista que no habías visto por llevar mal colocados los espejos retrovisores.
La DGT y la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil advierten que es muy habitual llevar mal ajustados o en mal estado los espejos retrovisores, sobre todo los laterales, que son los que nos permiten ver el tráfico que nos rodea por ambos lados y eliminar los peligrosos puntos ciegos o ángulos muertos a izquierda y derecha. La Guardia Civil tiene un truco para saber si llevamos bien puestos los espejos exteriores.
«¿Sabes cómo eliminar los puntos ciegos? Los tres espejos del vehículo deben aportar la información de forma conjunta. Cuando el vehículo desaparezca del espejo central inmediatamente debe aparecer en el espejo lateral (para ajustarlo bien no debes ver a tu propio vehículo)», explica la Guardia Civil a través de Twitter.
Los espejos laterales, bien abiertos
La clave para saber si llevamos bien ajustados los espejos exteriores es si vemos nuestro propio vehículo a través de ellos, un error bastante común y que muy pocos conductores conocen o hacen bien. «Cuando usted ajusta su espejo para eliminar el punto ciego debe hacerlo de tal manera que usted no vea su propio vehículo. Si lo ajusta como es la (mala) costumbre, usted ve parte de su propio vehículo y pierde de vista a los vehículos que lo rodean, lo que puede causar un accidente», aclara la Guardia Civil.
Otra forma de saber si llevamos bien orientados los espejos es hacer la ‘prueba del horizonte trasero’. «Los tres espejos del vehículo trabajan en conjunto: cuando un vehículo salga de su espejo central (interior) inmediatamente debe aparecer en el espejo lateral. En el ajuste tradicional (erróneo) usted notará que el espejo lateral y el central muestran la misma parte del vehículo que le sigue justo detrás (por su mismo carril), lo que indica que están mal regulados», explica la infografía de la Guardia Civil.
La DGT insiste con bastante frecuencia a través de Twitter que hay que mantener los espejos en estado óptimo y comprobar que están bien ajustados antes de iniciar la marcha, sobre todo si es un coche compartido o alquilado. La clave para saber si los tenemos bien orientados, es si proporcionan un campo de visión amplio. «Cuanto más abiertos estén (los espejos laterales), más visibilidad tendremos y habrá menos ángulo muerto», explica la DGT en uno de sus ‘tweets’.
De esta manera, cuando nos adelanta un coche, comenzamos viéndolo por el espejo retrovisor interior y, cuando su imagen aún no ha desaparecido, empieza a aparecer en el retrovisor exterior. Así, los ángulos muertos desaparecen prácticamente. Además, la DGT recuerda que observar el tráfico a través del retrovisor central y el izquierdo no debe implicar ningún movimiento de cabeza, únicamente debemos mover los ojos. «Para mirar el espejo interior y el lateral izquierdo no es necesario mover la cabeza», subrayan los responsables de la vigilancia y el control del tráfico.
Según el Real Automóvil Club de España (RACE), con los espejos laterales sólo debemos ver el final de nuestro vehículo. «Los espejos retrovisores laterales reducen los ángulos muertos, por lo que al ajustarlos debes comprobar que sólo veas el final de tu vehículo (lo mínimo para tener una referencia espacial). Cuanta menos zona de la carrocería (de tu vehículo) veas, mayor será el campo de visión«, puntualiza el RACE.
Multa por no llevar los espejos retrovisores obligatorios
El Reglamento General de Circulación (RGC) establece que todos los vehículos están obligados a llevar los correspondientes retrovisores obligatorios, aunque el número variará según la categoría y tipo de vehículo. Es uno de los requisitos indispensables para pasar la ITV correctamente. En los vehículos destinados al transporte de personas de hasta 9 plazas (turismos) son obligatorios el retrovisor lateral izquierdo y el central, mientras que el derecho es opcional.
Si se da el caso de que el espejo central interior queda inhabilitado por alguna circunstancia entonces será obligatorio llevar el retrovisor derecho en perfecto estado. Circular sin alguno de los retrovisores obligatorios o en mal estado es una infracción grave del Código de Circulación y está sancionado con una multa de 200 euros en España.
